miércoles, 10 de febrero de 2010

¡FELICIDADES TSE!

Perspectiva
Columna de los miércoles en La Prensa Libre
Por Federico Malavassi

La administración de los comicios ha ido cambiando mucho en Costa Rica. Cada cuatrienio cuesta más encontrar miembros de mesa para las juntas electorales. El Tribunal Supremo de Elecciones ha ido tomando el pulso de la actitud costarricense y ha ido supliendo y anticipando con prudencia e inteligencia.

Me explico con claridad. El domingo pasado acudí con un equipo de fiscales generales a diversos centros de votación, con el fin de ejercer una fiscalización estricta de las elecciones. Lo que encontramos debe decirse: orden, respeto, responsabilidad y gente trabajando en cada junta con absoluto apego a la legalidad.

Desde los delegados que vigilaban los centros hasta los auxiliares en las juntas, el asunto estaba controlado y normal. En las Juntas en las que había miembros de mesa (en ninguna había miembros designados por todos los partidos) había camaradería, confianza, eficiencia y trabajo en equipo. Percibí sentido de responsabilidad, atención y una oficiosidad positiva en todos los delegados del TSE y demás auxiliares que ví trabajando. ¡Nada que reprochar!

Contrasta con los recuerdos de los años setenta, cuando había mucho celo, constantes fricciones, malicia para ponerse los colores del partido, presiones y exceso de desconfianza.

Igual sucedió con los cómputos y acceso a ellos en las páginas del TSE. Oportunidad, claridad y precisión.

De manera que es menester destacar la jornada cívica pasada. El candidato de mis simpatías no ganó, pero no hay reproche que hacer al Tribunal en la administración de las juntas y centros electorales. Si hubo algún abuso gubernamental (tema para otro día: publicidad, programación de inauguraciones, inauguraciones incompletas y hasta notas sobre el techo del estadio) eso es harina de otro costal.

Quizás la falta de incidentes marcó el día, para algunos hasta aburrido. Me imagino que esa es la aspiración del TSE (un día sin novedades, calmo, sin incidentes, sin sorpresas y con estricto apego al plan trazado). Es mejor aburrido, asoleado y rutinario que lleno de anomalías y dudas, violento y movido.

Antes había peleas por esquinas e insultos, el domingo vimos familias y barrios ondeando sus preferencias mezcladas, alegres y sin peleas. Menos pasión y más paz. Símbolo inequívoco de madurez.

Supongo que luego de la tradicional lectura de resultados y cortes (antaño eran telegramas) con la presentación de cuadros y porcentajes (dejando casi sin trabajo a analistas y periodistas) los magistrados del TSE durmieron tranquilos como benditos. ¡En buena hora!

No hay comentarios: