miércoles, 30 de julio de 2008

¿QUÉ GANAMOS?

Perspectiva
Columna de los miércoles en La Prensa Libre
Por Federico Malavassi

Es la pregunta que me hago con el tema de Petrocaribe. ¿Qué ganamos?

Si los consumidores de hidrocarburos (gasolina, diesel y demás) pagamos al contado lo que compramos, ¿qué se gana con diferir el pago y pagar al crédito?

La pregunta es importante, pues de la respuesta va a depender mucho de lo que se haga en nuestro país.

Obviamente, la idea de obtener un crédito por nuestro consumo en petróleo suena rara y complicada. El hecho es que se trata de una transacción pública (sufrimos el monopolio de Recope) y el ente público recibe el dinero de los consumidores de combustibles en pago al contado.

Así que resulta obvio que el gobierno tendría el dinero al contado pero … él no haría los pagos al contado sino que “jinetearía” la plata hasta el momento de su pago. O sea, se crearía un deuda. Sería una obligación que pagarían nuestros hijos o nuestros nietos.

Un principio de buena administración (sobre todo pública) es trabajar al contado y no inventar deudas. Si se tiene el dinero para pagar ¿para qué inventar una deuda?

El asunto se vuelve más dramático si atendemos al hecho de que el petróleo se paga en dólares. O sea, que los dólares de hoy significarían más colones en el futuro.

Por primera vez en mucho tiempo ha habido superávit fiscal. El gobierno ha estado recibiendo más dinero del que gasta. Tal situación debería servirnos para sanear las finanzas públicas, ordenar el gasto y depurar la administración. No debería aprovecharse para endeudarse más.

Me preocupa que el actual equipo de gobierno (sobre todo Poder Ejecutivo) esté pensando en utilizar ahora los recursos de los combustibles (con la plata que pagamos todos al contado) y dejarle a los gobiernos futuros la gran jarana. Eso sería desleal. Solo se podría justificar en un verdadero caso de emergencia para una inversión que beneficie a varias generaciones.

Dicen que la deuda del futuro se podría llegar a pagar con arroz, frijoles o chancho. El diputado Mario Quirós nos pide visualizar a los costarricenses del futuro, llegando a las bombas de gasolina para pagar el consumo al contado y llevar frijoles, arroz y chicharrones para pagar el extraprecio del dinero que sus abuelos dejaron que no se pagara. ¿Grotesco, verdad?

¿Será que el actual oficialismo quiere gastar hoy la plata de mañana? ¿Algo así como “después de mí el diluvio”?

¿Sería como una extensión de la zumbagogia, usando el dinero para hacer comparsa y ganar adeptos?

Después de lo que vamos sabiendo de las consultorías del BCIE yo no estoy dispuesto a más tratos de este tipo. Me parece que no quieren comer …

miércoles, 23 de julio de 2008

¿INTROMISIÓN, SOBERANÍA Y CONSULTORÍAS?

Perspectiva
Columna de los miércoles en La Prensa Libre
Por Federico Malavassi

Algunas cosas van quedando al descubierto con el tema de las consultorías.
Ha trascendido que se usa un dinero de la GTZ (la Agencia de Desarrollo Alemán) para preparar, dentro del marco de la Reforma del Estado, un proyecto de Reglamento de la Asamblea Legislativa.

Quisiera saber si así está puesto, tan explícitamente, que la GTZ dará dinero para que desde el Ministerio de Planificación se diseñe un nuevo Reglamento de la Asamblea Legislativa.
¿Por qué? Muy sencillo. No me parece correcto, ni deseable, ni propio que el Reglamento de la Asamblea Legislativa se construya desde el Poder Ejecutivo.

¿Por qué? Muy claro. La división de poderes. ¿Se trata de hacer un Reglamento a la medida del Ejecutivo? Peor aún, ¿se trata de dineros internacionales para brincarse la división de poderes?¿Cuál es el espíritu o intención? ¿Saben los amigos alemanes que su plata se usará para ello? O ¿estarán igual que los taiwaneses, sorprendidos con el rumbo de las donaciones? Todavía más sorprendente ha resultado descubrir quiénes están dando la “consultoría” para cambiar el Reglamento. Nada menos que Mario Redondo y Epsy Campbell. Los antiguos socios del Paquetón Fiscal y demás yerbas.

¡Ahora sí que quedó todo claro! Abel Pacheco dijo que no tramitaría paquete tributario y que propondría presupuestos equilibrados. No cumplió. Su acción gubernamental casi se limitó patológicamente a impulsar el paquete de impuestos.
De repente quedó claro que el PLN era el impulsor principal. Incluso aparecieron los hermanos Arias como asesores de Abel Pacheco.

Además, desde la Cámara de Comercio impulsaron acción de inconstitucionalidad contra el Reglamento: les incomodaban los derechos de las minorías y el correcto trámite legislativo.
Creíamos que había sido un fracaso y un fiasco (la primera comisión se les murió y el segundo proyecto resultó inconstitucional). Estábamos equivocados, tenían favores que cobrar.
Lástima que con dinero de la GTZ y en roce con la división de poderes.
Quedará al PAC y al PUSC preguntarse qué hacen sus partidarios en esa comisión y qué hacían y para quién con el paquete tributario.

A mí no me convence una reforma del Estado nacida de estos pactos tributarios y de las ansias de desarmar a la oposición y las minorías. Menos si va acompañada de la falta de habilidad y demostrada inconstitucionalidad con que se manejó el tema tributario en el período anterior.

miércoles, 16 de julio de 2008

DON OSCAR: LO BUENO, LO MALO Y LO FEO

Perspectiva
Columna de los miércoles en La Prensa Libre
Por Federico Malavassi

De los sucesos gubernamentales de la última semana, debemos destacar lo bueno, lo malo y lo feo.

Lo bueno:Que el presidente Arias haya decidido cumplir el precepto contenido en el texto constitucional del artículo 135 y su recta y acostumbrada interpretación. Al menos para su próximo viaje, anunció que sí va cumplir con su obligación de llamar a la Vicepresidenta para que le reemplace en su ausencia.

No parecía correcto ni prudente, en el estado actual de cosas, buscarse un pleito más. Menos si detrás de ello hay un tema electoral complicado, una interpretación constitucional rebuscada y un incumplimiento obvio.

Implicaría una soberbia inaceptable, al estilo de Luis XIV, y considerarse por encima de los demás, de sus leyes y su Constitución, de su interpretación y de sus tradiciones. ¿Solo para allanar el camino de su momentáneo deseo de sucesión presidencial? ¡Qué dicha que va rectificando!

Lo malo:Los pagos del BCIE evidencian algo grave y penoso: el desgobierno de Abel Pacheco. ¿Por qué aparecen recibiendo jugosos honorarios algunos de sus cercanos colaboradores como Lineth Saborío, Pablo Ureña y Mario Redondo? ¿Se trata de una demostración de continuidad? ¿O será más bien lo mismo, pero al revés? O sea, que más bien Óscar Arias había logrado empezar su gestión desde el desgobierno anterior. Ello explicaría mucho … Explicaría por qué Mario Redondo visitaba públicamente a Óscar Arias llevándole como ofrenda el infame paquetón fiscal. En realidad andaba tras lo suyo y haciendo un programa ajeno … Evidenciaría que, al no haber proyecto Pacheco, entonces Arias logró imponer sus tesis tributarias y haría salir a la luz quiénes le hacían el cachete. Explicaría cómo y por qué algunos de los pleitos de Pacheco eran en realidad pleitos de Arias y quiénes se los llevaban. Además de dejar mal parados a algunos (no decían verdad, no defendían al PUSC ni sus tesis y traicionaban a sus colegas), señalaría a Arias como el verdadero responsable del atraso en la tramitación del TLC, con todas las consecuencias (que son muchas, incluyendo a los obsecuentes empresarios que toleraron tales desparpajos y las ulteriores irregularidades).

Asimismo, sería la explicación de tantas calenturas pasadas y sufridas, desde la Cámara de Comercio hasta conspicuos columnistas.

Lo feo:Sin lugar a dudas, la “zumbagogia”. Acordeón, demagogia y dinero para unos, pero los problemas de vivienda siguen si resolverse. ¿Será que el negocio es no resolverlo? ¿Sería como matar a la gallina de los huevos de oro? Qué feo, tantos millones perdidos en engrosar algunos bolsillos en tanto los problemas se agudizan y la comparsa mete bulla. Sin palabras… y eso que las investigaciones apenas comienzan.

miércoles, 9 de julio de 2008

¿QUIÉN ESCRIBE LA HISTORIA?

Perspectiva
Columna de los miércoles en La Prensa Libre
Por Federico Malavassi

Algunas veces, cuando se mira la gacetilla periodística de sucesos que uno ha presenciado, vivido o protagonizado, queda un amargo sabor por la discrepancia entre los hechos y la narración.

A veces no se trata más que de la perspectiva del informante. Otras, se percata uno de que la verdad tiene varias versiones. Sin embargo, en algunas ocasiones no hay modo de conciliar o adecuar las versiones con la realidad.

Esta semana nos ha dado la oportunidad de reflexionar al respecto.
Ante el tema de las asesorías pagadas por el BCIE (Banco Centroamericano de Integración Económica), se pregunta uno, como en la lógica, cuál será la verdad real del asunto. ¿Por qué el BCIE da estos dineros al Poder Ejecutivo? ¿Para que haya manga suelta? ¿Cuánto paga de dividendos a los socios y por qué no están estos dineros en los dividendos? ¿Acaso no es un Banco de Derecho Público Internacional? No todo es igual, por eso no es justo medir con la misma vara.


No es lo mismo un honorario ocasional que un pago periódico. Si los pagos periódicos van a sociedades, se cae toda la argumentación de salarios, CCSS e idoneidad en nombramientos. Peor cuando se paga periódicamente (por supuesta experticia en trámites legislativos) a quien ni haciendo trampa pudo pasar el paquetón fiscal, se le murió un proyecto, el otro se lo rechazó la Sala Constitucional y ocultó un informe del Poder Judicial sobre el proyecto. ¿Qué se le está pagando? Hay que preguntarse si algunos pagos ponen de relieve un gobierno, una organización o una planilla paralela. Asimismo, si eso es moral o no. Y … por supuesto ¿qué gana el BCIE con todo esto? ¡Ay! ¡Si pudiéramos saber la verdad real y no los pedacitos que nos dejan ver! La renuncia de la Directora del Museo de Arte Costarricense pone de relieve otra faceta del asunto.


Casi un pleito de patio por la foto de los treinta años. Que si don Guido… que si don Óscar… que la imagen del Presidente… que es la hija de…Al final me quedo con el sabor amargo de la historia oficial. Estaremos perdiendo la historia verdadera entre pagos del BCIE y pleitos de palacio. ¿A quién le importa la verdad? Como que quienes no estamos en el presupuesto no tenemos derecho a saber, ni a opinar, ni a escribir ni a hacer la historia. ¿La escriben otros con el dinero de los demás?

miércoles, 2 de julio de 2008

¡ASI NO SE VALE, DON OSCAR!

Perspectiva
Columna de los miércoles en La Prensa Libre

Por Federico Malavassi

Es como una obra compleja (dos tramas), representada por actos.

En una de ellas, aparece el aumento en los precios de petróleo como primer acto. En la otra, se nos informa que el vehículo de una viceministra del MOPT circula sin placas. Luego, sin ley ni estudio previo, aparece una prohibición para circular por el área delimitada por la carretera de circunvalación metropolitana. Se sancionará con multa de 5 mil colones al infractor (sin modificación al Código de Tránsito).

En la otra obra, el primer acto estuvo apareció como la renuncia del vicepresidente Kevin Casas (por el mentado memorándum). El segundo acto por la manifestación expresa de que la vicepresidenta supérstite es la ungida como sucesora en Casa Presidencial. El tercer acto lo aporta el conspicuo asesor jurídico de la administración se raja con una opinión acerca de una supuesta mala praxis constitucional (mala práctica o mala costumbre constitucional). Dice que la mala costumbre se basa en una mala interpretación del artículo 135 de la Constitución.

Tal artículo, en síntesis (pero invito a todos a consultar el texto), está compuesto de tres párrafos: a) El primero prevé la existencia de dos Vicepresidentes y señala que en “ausencia absoluta” del presidente lo reemplazarán “por el orden de su nominación”. b) El segundo literalmente dice “En sus ausencias temporales, el Presidente podrá llamar a cualquiera de los Vicepresidentes para que lo sustituya” –obviamente el asesor presidencial se agarra de este “podrá” para introducir su versión–. c) El tercer párrafo aclara todo, dice que: “Cuando ninguno de los Vicepresidentes pueda llevar las faltas temporales o definitivas del Presidente, ocupará el cargo el Presidente de la Asamblea Legislativa”.

Claramente, luego de leer el tercer párrafo, queda evidente que el “podrá” del segundo párrafo se refiere a pasar por alto el orden de nominación de los vicepresidentes. De manera que el presidente, en sus ausencias temporales, podrá llamar a uno u otro. La Constitución no dice qué es “ausencia temporal”, más este es un concepto jurídico indeterminado que la costumbre se ha encargado de determinar.

Este artículo fue un globo de ensayo. Pero desdichadamente nadie respondió. El jueves de la semana pasada el Presidente notificó a la Asamblea que salía del país y que no designaba a la Vicepresidente. Finalmente el Presidente salió del país y volvió y aquí como si nada.
Para fundir ambas tramas, me aprovecho de que el Presidente publicó un artículo diciendo que “Este barco tiene capitán”. En tal publicación, pide confianza y la emprende contra quienes no quieren cumplir la restricción vehicular, “planifican ignorar la restricción” y esperan que no los “pesquen”.

Señor Presidente, la restricción a su conducta es de origen constitucional. La tradición de su interpretación también es de jerarquía constitucional. ¡Cumpla! En cambio, la restricción vehicular es un antojo sin fundamento racional, ejecutado por quien no cumple la Constitución y por una Viceministra que ni siquiera porta placa.

La Ley General de Administración Pública es clara: las fuentes no escritas (como la costumbre) tienen la jerarquía de la fuente escrita (Constitución) que integran, delimitan o interpretan. No puede invocar el criterio de su asesor para irrespetar la norma. Tampoco debería restringir una libertad pública por Decreto.